Existen productos financieros que los bancos ponen a disposición de los clientes. Pero deben tener un aval que les garanticen el retorno del dinero invertido, estos son denominados préstamos con aval. A través de estos productos, los bancos les prestan dinero a las personas a cambio de que se lo devuelvan con intereses. Si el dinero no es devuelto, toman el aval como garantía.
Generalmente el aval puede ser una persona que asume la responsabilidad del pago o un bien que tenga un valor similar o superior al préstamo realizado. Con esto el banco garantiza el retorno de la inversión en caso que el prestatario incumpla con su obligación de pagar. Es un instrumento de riesgo porque si el dinero no es devuelto, el banco recurre al aval para reclamar y hacer efectivo el pago.
Tipos de aval que se pueden ofrecer ante un préstamo
En el momento que se va a solicitar un préstamo son varios elementos que hay que considerar para seleccionar la opción adecuada. Esto motivado porque cada préstamo tiene sus propias características, una de ellas es el aval. Muy utilizado por las entidades bancarias en algunos tipos de préstamos y que a los prestatarios les genera múltiples dudas.
Existen varias maneras de avalar un préstamo, con lo que se garantiza el pago de una deuda en el caso que no se pueda cumplir con la obligación previamente establecida. Algunas de estos tipos de avales son los siguientes:
Préstamos con aval de personas
Estos son préstamos en los que el prestatario contará con otra persona para responder ante el banco. Esto en el caso de que el prestamista incumpla con los pagos del préstamo otorgado o se le haga imposible pagar por completo la deuda. Ante esta situación la persona que sirve de aval debe pagar con su dinero la deuda que tiene el prestatario. Inclusive puede pagarla hasta con un bien que esté a su nombre.
Las personas que sirven de aval tienen las mismas obligaciones que el prestatario y al momento de la firma están aceptando las mismas condiciones crediticias. En pocas palabras, si la persona aval tampoco puede asumir el pago, puede llegar a ser embargado y pasar al listado de morosos financieros.
Es muy importante que se sepa, que si la persona que sirve de aval debe hacerse cargo de la deuda del prestatario. Este puede solicitarle la cantidad de dinero que él ha tenido que abonar a la deuda. Otro punto interesante es que las deudas son hereditarias, por lo que en caso de fallecimiento, los herederos deben asumir las deudas.
Préstamos con aval inmueble en garantía
Los préstamos que utilizan como garantía un inmueble, no requieren de una persona o de alguna institución bancaria que avale el préstamo para la devolución del dinero. El mismo prestatario pone en garantía un objeto o bien inmueble con un valor similar o superior a la deuda adquirida. Así el prestamista se queda con ese bien aval en el caso de que el prestatario no pueda pagar la deuda.
Bajo esta modalidad las personas pueden solicitar préstamos con aval de coche online, que es uno de los más habituales. Préstamos con aval vivienda, en la que las personas pueden poner en garantía una casa que por lo general no es la principal, entre otros bienes.
Préstamo de aval bancario
En este tipo de préstamos con aval, es una institución financiera la que asume la deuda de un prestatario en el caso de que este incumpla con la deuda adquirida. Ya sea con otra institución financiera o con un tercero.
En este caso los prestatarios deben pagarle a la institución que le sirve de aval, además de la deuda que pagó, comisiones que dependen del plazo, del tipo y del riesgo. Por lo general los bancos sólo avalan a sus propios clientes, es difícil que los bancos avalen a personas que no estén dentro de su cartera de clientes, aunque hay excepciones.
¿Cuáles son los requisitos para ser un aval de un préstamo?
Para convertirse en un avalista de algún préstamo se debe cumplir con ciertos requisitos que sean los suficientemente garantes ante un prestamista. Con ellos se debe demostrar capacidad para la devolución del dinero en caso de algún impago. Por lo general, los requisitos son:
- Que la persona sea mayor de edad
- Que tenga una fuente de ingresos estable, como por ejemplo, una pensión o una nómina. Con eso garantiza que el aval puede cumplir con los pagos mensuales, cuando el prestatario no pueda pagar.
- Que tenga patrimonios que estén completamente pagados y a su nombre. Esto es indispensable, ya que de no contar con liquidez para pagar, debe responder con su patrimonio. Así saldará la deuda del prestatario con el prestamista.
Normalmente, una persona no podrá ser aval de préstamos con aval de coche o de cualquier otro tipo de préstamo si tiene alguna deuda pendiente por pago. Pero si tiene 18 años, ingresos mensuales estables, un buen inmueble completamente pago y a su nombre, y no tiene deudas, puede avalar un crédito.
En casos de falta de pago ¿A quién embargan primero al prestatario o al aval?
Esta es una de las preguntas más frecuentes cuando se solicita préstamos con las instituciones financieras. Si ambos incumplen con los pagos establecidos, es importante saber a quién se le va a embargar primero algún bien. Cuando esto ocurre, la institución financiera que otorgó préstamos con aval evalúa la situación financiera del prestatario para saber por qué dejó de pagar.
Si comprueba que el prestatario está en bancarrota y no tiene cómo pagar, inmediatamente evalúa la situación financiera del aval. Si este cuenta con los ingresos para afrontar la deuda, seguirá pagando con los plazos establecidos. Pero si no dispone de liquidez, el banco embarga el patrimonio que esté libre de carga.
Los préstamos con aval piso son más seguros para las empresas porque tienen la tranquilidad de que el préstamo será retornado, ya sea por el prestatario o por el aval. Pero siempre es un gran riesgo porque el aval puede verse en complicaciones e inclusive puede perder su vivienda o su vehículo.
Tipo de préstamos con aval
Existen varios tipos de préstamos con aval a las que las personas optan para tener altas sumas de dinero sin afectar su capital, entre las más comunes se encuentran:
Préstamos con aval hipotecario
Con este tipo de préstamos se pone como garantía de pago un bien inmueble que sea propiedad del prestatario o de la persona aval. No necesariamente tiene que ser una vivienda, puede ser un local comercial, un terreno, una promoción inmobiliaria, entre otros.
Por lo general, la cantidad de dinero a conseguir está estrechamente relacionada con el valor del inmueble que está hipotecando. Por lo general ronda entre el 40 y el 50% del valor del inmueble hipotecado. Es un préstamo muy utilizado por las empresas que poseen varios bienes, con la idea de conseguir liquidez de una manera rápida.
En algunos casos, los clientes recurren a los préstamos con aval SGR en donde las Sociedades de Garantía Recíproca facilitan el acceso a los créditos a las Pymes e independientes. Ellas en estos casos fungen como figura aval ante los bancos o ayudan a lograr mejores condiciones crediticias para los prestatarios.
Préstamos con aval de casa
Este tipo de préstamo tiende a confundirse con los créditos hipotecarios. Mientras que los créditos hipotecarios son instrumentos destinados para la adquisición de viviendas, en los préstamos con aval de casa, el inmueble es puesto como garantía para conseguir dinero.
Por lo general, ese dinero es utilizado para saldar deudas, para unificarlas, para el pago de impuestos y sucesiones ante alguna herencia, entre otros usos. Es muy importante no poner en riesgo el inmueble donde vive la familia, porque de no pagar, la familia puede quedar en la calle.
Préstamos con aval del estado
Este tipo de préstamos por lo general es otorgado cuando el Estado activa políticas para el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas, denominadas Pymes. La banca otorga estos préstamos con la garantía de que si los prestatarios no pagan, el Estado asume la deuda de estos.
Por lo general los intereses que se generan en este tipo de préstamos son muy bajos. Ya que las condiciones están establecidas por el Estado y no por las entidades bancarias. Los bancos por lo general otorgan estos créditos a clientes propios, porque ya tienen un histórico de su comportamiento crediticio.
¿En qué consisten los préstamos con aval de nómina?
Este tipo de préstamos con aval es un financiamiento que los bancos otorgan, por lo general a plazos y tasas de interés fija. Por lo general este tipo de préstamos es utilizado para solventar algún imprevisto que se le presente a una persona.
No se le otorga dinero que supere la capacidad de pago mensual, ya que dicho pago le será descontado de manera automática de su sueldo. No puede afectar la economía del prestatario, por lo que el monto no puede superar un porcentaje establecido por ley de su ingreso mensual.